Bueno pues ya sucedió, el
pasado 26/01/2015, mi hijo José Gabriel Castroconde Cartagena cumplió sus 25
años de vida y a pesar de que en ley a partir de los 18 años se es adulto, seguro
estoy que todos coincidimos que los 18 solo son la mayoría de edad pero no
necesariamente la adultez. Sin embargo
los 25 pues sencillamente quien a esa edad no ha alcanzado cierto grado de
madurez, lo más probable es que no la alcance nunca. Salvo aquellos casos en
los que les toca madurar a puro pencazo de la vida y aun así hay quienes no
maduran nunca.
Eso no quiere decir que se
abandonen los sueños de la juventud y mucho menos los planes y todo aquello que
nos dijimos en la adolescencia que seriamos cuando seamos grandes. Pues José
Gabriel se ha caracterizado por ese especial mantener sus sueños y planes vivos.
Probablemente no ha cumplido como otros sus metas en el tiempo teóricamente y
socialmente establecidos pero hasta aquí ha cumplido los realmente importantes o por lo
menos los que conmigo ha compartido. Por ejemplo y probablemente el más
importante a estas alturas de la vida es el ya ser prácticamente ingeniero mecánico
(solo le falta el EPS) y haberse colocado laboralmente en una empresa que además
de remunerarlo mucho muy por arriba de muchos colegas, le está permitiendo
viajar dentro y fuera del país y aprender… pues sencillamente la universidad de
la vida que en definitiva es la que nos lleva a todos a alcanzar la mayoría de
nuestras metas.
Este mi patojo tuvo la
suerte de encontrar buenas amistades en el grupo de la iglesia a la que perteneció
durante prácticamente toda su juventud y adolescencia, convirtiéndose en uno de los principales líderes
juveniles del movimiento. Dirigiendo a otros jóvenes para así también encausarlos
por un sano y mejor camino. Sin duda esta experiencia tuvo que haberlo marcado
tanto humana como espiritualmente. Agradezco a Dios por haberlo puesto en ese
camino ya que los padres no siempre sabemos o podemos enseñar todititito en la
vida.
Ha sabido llevar una relación
con su novia de toda la vida (o sea la única) y las veces que he compartido con
ellos logro ver el respeto y sentimiento que se tienen lo cual me lleva a ver
en él un alma sana y buena. Seguro que esta característica le ayudara a ver también
lo bueno de las personas y la vida y no solo lo triste de la humanidad y sus feas
complicaciones.
A diferencia mía, probó el
cigarro y el alcohol, se quito la duda y sencillamente decidió que eso no era
para él. No fuma y pues de vez en cuando se toma un par de chelas y ya. Te
felicito por eso José Gabriel. Si te mantienes así siempre, te evitaras un montón
de problemas y pues serás mas sano que los que no tuvimos la capacidad de decir
NO en la juventud.
Pero no crean que es un
santo listo a beatificación. No para nada. Cuando decide molestar es una
verdadera ladilla. Y esto lo trae desde pequeño. Tiene la maña de agarrarme las
lonjas y apretarme tan fuerte que pues de plano lastima. Entre más me pongo
como la chingada, mas me molesta y sencillamente me responde: “Aaaa y cuando
vos me torturabas de chiquito que??. Me tengo que desquitar”.
Te quiero, admiro y felicito
hijo por lo bien que estas llevando tu vida. Le pido a Dios que te bendiga muchísimo
día a día y te permita mantenerte siempre bien en el camino que hoy por hoy
llevas. Así como todos dicen tener la mejor madre del mundo, yo se que vos sos
uno de los mejores hijos y mi corazón se hincha y enorgullece del hijo que Dios
me dio.
